La adaptación ayuda a moldearse a las circunstancias y sobrevivir al poner a prueba nuestros mejores recursos.

La resiliencia es la capacidad de una estructura para recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había sido sometida.

Probablemente y ante las circunstancias sanitarias y económicas que se están dando, las Empresas y sus componentes humanos, necesitaran adaptarse y ser resilientes a las nuevas situaciones que nos enfrentamos: inseguridad e incertidumbre.

La inseguridad y la incertidumbre, son dos conceptos mentales que solo se cambian con la actitud de esperanza. Nuestra proyección mental debe estar basada en positivo y que toda situación adversa termina pasando. Solo nuestra determinación derribará los muros mentales de un futuro incierto y un presente inseguro.

En el último siglo Europa ha tenido guerras civiles y dos guerras mundiales que devastaron países, economías y sociedades. Sus ciudadanos tuvieron la capacidad de adaptación y resiliencia suficientes, para superar las adversidades.